Así es, este próximo año, tendremos que pagar un 4,2% más por utilizar el transporte público. Todo esto después de un año de problemas, cortes en el servicio, aglomeraciones... en fin... lo que todos sabemos.
Y ahora, curiosamente, la tarjeta que más sube es la que más se utiliza, la T-10 (en concreto un 4,35%), que pasará a valer 7,2 euros por la de una zona.
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